9 mitos comunes sobre la toxina botulínica y los rellenos faciales

La industria de los inyectables está creciendo cada vez más y más, sin embargo con ella crece también una ola de desinformación y mitos que dificulta todo el proceso de decidir si estos tratamientos son seguros o adecuados. 

Se hace conveniente aclarar algunos de los conceptos erróneos más comunes cuando se trata del mundo de los tratamientos con Botox (el nombre comercial de los tratamientos con toxina botulínica tipo A) y los rellenos faciales para ayudar a tomar una decisión más informada.

  1. Las inyecciones cosméticas son muy dolorosas.

La sensación con la que la mayoría de las personas comparan las inyecciones de toxina botulínica es con la de una picadura de mosquito. Las inyecciones de botox son muy rápidas, por lo que cualquier molestia solo se siente durante unos segundos.

No hay necesidad de anestesia, ya que es un procedimiento tolerable y rápido, la aguja utilizada es muy fina, por lo que el trauma en el área es mínimo.

2. La toxina botulínica te lleva a una pérdida de la expresión facial

Algunas personas solicitan, a propósito, verse con una apariencia como si estuvieran congeladas, pero esto es algo que tendrían que pedir específicamente para que el médico modifique la dosis.

Para aquellos que tienen cantidades regulares y que son inyectados por un médico que entiende que se desea un resultado más natural, podrá lograr una apariencia renovada y mejorada. La toxina actúa relajando el músculo inyectado, reduciendo así la contracción y suavizando la zona. Solo se relajará la zona inyectada.

3. La toxina botulínica es lo mismo que el botulismo

Toxina botulínica no consiste en botulismo o intoxicación alimentaria. Aunque provienen de la misma toxina, el Botox está hecho de una proteína purificada que se deriva de la toxina. Durante muchos años, se han realizado investigaciones y pruebas exhaustivas sobre la seguridad y eficacia de los tratamientos con Botox.

4. La toxina botulínica es usada solo con propósitos cosméticos

El uso original de la toxina botulínica fue como tratamiento para trastornos neurológicos, no como tratamiento facial cosmético. Aunque hoy en día se lo conoce principalmente como un tratamiento cosmético, principalmente debido a su popularidad entre las celebridades, los médicos todavía lo usan regularmente para tratar muchas afecciones diferentes como migrañas, dolor crónico de cuello y espalda, bruxismo y vejiga hiperactiva. 

5. La toxina botulínica es tóxica, insegura y peligrosa.

La toxina botulínica se utilizó por primera vez en la década de 1970 para tratar el estrabismo. Desde entonces, este medicamento ha establecido un historial de seguridad, no ha habido ningún registro de muerte por sobredosis y hasta la fecha no se han observado efectos secundarios a largo plazo. Se necesitaría una dosis de más de 100 veces la dosis promedio administrada para uso cosmético para que los tratamientos cosméticos con toxina botulínica sean fatales.

6. La toxina botulínica y los rellenos dérmicos son solo para mujeres

Aunque los tratamientos de toxina botulínica son solicitados con mayor frecuencia por las mujeres, estos tratamientos también son populares entre muchos hombres. Este concepto erróneo puede deberse simplemente a que las mujeres hablan más abiertamente acerca de recibir estos tratamientos, mientras que los hombres quizás sean un poco más privados debido a este mismo mito. Los hombres también tienden a ser un poco más conservadores con los tratamientos que se realizan.

7. La toxina botulínica y los rellenos dérmicos son iguales

La toxina botulínica y los rellenos dérmicos son tratamientos cosméticos inyectables y, a menudo, ambos son ofrecidos por un médico, sin embargo, son productos diferentes y se utilizan para diferentes resultados. La toxina botulínica es un relajante muscular que se usa para suavizar la apariencia de arrugas y líneas finas, así como para prevenir la formación de arrugas. Los rellenos dérmicos se utilizan para construir un área, ya sea para restaurar el volumen perdido. Los rellenos dérmicos son más duraderos que la toxina botulínica y se realizan con ácido hialurónico.

8. Solo debes colocarte la toxina botulínica cuando te salgan arrugas

La toxina botulínica se puede utilizar eficazmente como medida preventiva para evitar que las arrugas se formen. Al colocar el botox en los músculos, que a menudo provocan arrugas, evitará que se contraigan demasiado y los mantendrá suaves, lo que limitará el movimiento y, por lo tanto, las líneas subsiguientes. Comenzar un poco más joven y ser proactivo en su enfoque puede significar que este tratamiento se necesita con menos frecuencia cuando sea mayor.

9. La toxina botulínica tiene un efecto inmediato.

En promedio, los tratamientos con Botox tardan aproximadamente 14 días en surtir efecto, y en otras áreas puede tardar entre 4 y 6 semanas. Esto se debe a que el tratamiento funciona cambiando el tamaño / fuerza del músculo inyectado. Todos somos diferentes, por lo que este es un período de tiempo general, es posible que vea resultados antes de los 14 días, sin embargo, no es posible ver resultados inmediatos.

En Relief, contamos con especialistas certificados y utilizamos los productos y materiales de la más alta calidad para brindate el mejor servicio.

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